domingo, 7 de septiembre de 2008

Evento de UPF en Congreso Nacional

ACLARACIONES
http://www.clarin.com/diario/2008/08/29/um/m-01748208.htm

http://www.clarin.com/diario/2008/08/30/elpais/p-01749387.htm

El motivo de las siguientes líneas es clarificar las versiones periodísticas que difundió un medio gráfico a propósito de la Conferencia Internacional de Liderazgo (ILC) “Hacia un nuevo paradigma de liderazgo y buen gobierno: Diálogo, cooperación y servicio para la paz", que realizó la Federación para la Paz Universal (UPF), el jueves 28 y el viernes 29 de agosto, en el Salón Auditorio de la Cámara de Diputados de la Nación, con la presencia de representantes de todos los sectores, y siguiendo todos los pasos administrativos para gestionar el lugar.

1. Agradecemos, en primer lugar, las más variadas muestras de solidaridad recibidas ante las injurias y calumnias vertidas en un medio de circulación nacional (Clarín), que una vez más ignoró la obra de la UPF y descalificó el inconmensurable trabajo de varias décadas de Sun Myung Moon (89 años), por la paz y fraternidad universal (
http://www.sunmyungmoon.com.ar/). Una vez más ha sido “chivo expiatorio” de quien sabe qué intereses, sufriendo un artero ataque que en su debido momento deberá ser esclarecido y reparado. En las mencionadas notas nada pudieron saber los lectores, a quienes asiste el derecho de ser informados sobre los hechos, del contenido del encuentro, del que ni siquiera se dio cuenta del título. Nada de las brillantes presentaciones de los conferencistas internacionales y la elevada calidad de la exposición y actividades que desarrollan en distintas áreas los panelistas. Ninguna mención a las incontables iniciativas de paz de la UPF alrededor del mundo, en el campo de la educación, el diálogo, la cooperación, el servicio, la integración, etc.; y más allá de las cuestiones de etnia, nacionalidad, religión y cultura. Sólo descalificaciones e intencionalidad política, que generó indignación generalizada y variados daños y contratiempos a personas e instituciones.

2. El Programa del ILC fue realizado por la UPF y la Federación Interreligiosa e Internacional para la Paz Mundial, entidad igualmente fundada por el Rvdo. Moon, con estatus ECOSOC en la ONU, que para otorgar este rango estudia fundadores, principios, financiamientos, membresía, etc. Por lo que queda claro que la utilización del término despectivo de “secta” resulta un agravio gratuito, con el que se descalifica a quienes expresan un pensamiento o creencia distinta al statu quo. ¿Acaso no se trató de un evento abierto y que tuvo como único requisito de ingreso una acreditación en la mesa de recepción, tanto para el público como para la prensa; que era de carácter ecuménico (interreligioso) y dirigido a todos los sectores del liderazgo? Cabe decir, por ejemplo, que la misma descalificación recibe aún hoy la propia Iglesia Católica en Rusia o China y ciertos grupos evangélicos en algunos países latinoamericanos; y de la que fueron objeto los mismos seguidores de Jesús hace 2000 años (perseguidos, crucificados y defenestrados como la “sediciosa secta de los nazarenos”, Hechos 24:5). Ni hablar de la Edad Media. Todo lo cual permite concluir con certeza que los parámetros que a veces se utilizan para hablar de “secta” o “lavado de cerebros” se activan en contra de un grupo u otro, según las circunstancias históricas y los intereses en juego.

3. Otra vez se repiten acusaciones con total liviandad, que se reciclan cada tanto desde hace décadas de acuerdo a los intereses de turno, dañando el honor de personas e instituciones. Entre otras, los autores de sendas notas del medio gráfico en cuestión enlodan todo y a todos de un plumazo al mencionar al pasar en la nota de un supuesto “tráfico de armas” al Rvdo. Moon, desconociendo que ningún tribunal lo condenó por tales hechos, ni siquiera lo llevó a fueros judiciales por tales acusaciones. También oscurecen su figura al hablar de una supuesta “evasión fiscal” (llegando al extremo de compararlo con Al Capone), sin aclarar que el encarcelamiento del que fue objeto en 1984, de cuando estableció el fundamento de su Iglesia en Estados Unidos, a principio de la década del ‘70, por el irrisorio monto de poco más de siete mil dólares, resultó una evidente persecución religiosa, una clara violación a las libertades individuales reconocida luego por una investigación realizada por una Sub-Comisión del Senado de dicho país. Al respecto existe un minucioso estudio del periodista Carlton Sherwood, ganador del Premio Pulitzer, quien afirmó que el Rvdo. Moon “fue juzgado y sentenciado por operar su Iglesia del mismo modo que lo hacen los demás cultos establecidos en EEUU”, considerando “asombrosa” la “hipocresía” con la que se llevó adelante la indagación y la acción judicial que demandó sumas astronómicas de dinero para lograr su cometido.

4. En la historia el statu quo se rasgó una y otra vez las vestiduras y vio demonios en personas e instituciones de elevados ideales que el devenir del tiempo convirtió luego en lo socialmente aceptable e incorporó a sus referentes como adalides de las libertades y las reivindicaciones de la dignidad humana, desde los judíos esclavizados en Egipto y los cristianos recluidos durante los primeros siglos en las catacumbas, pasando por los reformadores medievales condenados a las hogueras, hasta dos estandartes contemporáneos de los principios y valores espirituales, como Gandhi y Luther King, defenestrados, encarcelados y finalmente asesinados; y hoy glorificados por su lucha e ideales. Durante la última semana se repitió la misma historia en nuestro querido país, mellando el honor de personas e instituciones con descalificaciones o repeticiones de calumnias que se vienen reciclando hace más de dos décadas sin la más mínima variación, lo que además continúa alimentando más prejuicios en nuestra sociedad en un tiempo que los medios deberían ser protagonistas del despertar de conciencias y la evolución de mentalidades y no de retrocesos y nuevas persecuciones. Esto resultan claras violaciones de los principios y libertades consagrados en nuestra Constitución Nacional y la propia Declaración de los Derechos Humanos de la ONU, de la que este año se celebrará 60 años; atropellos que en Argentina contempla además la Ley 23.592/1988, que pena todo acto discriminatorio por razones de raza, religión, nacionalidad o ideología.

5. La UPF viene realizando seminarios como el que tuvo lugar en el Salón Auditorio de la HCDN (que cedió el recinto en nota del 26 de junio luego de un pedido formulado el 9 de mayo) hace varios años en distintos países del mundo, sin restricciones, en entidades gubernamentales o privados, como el que tuvo lugar a principio de julio en Paraguay (
www.youtube.com/watch?v=iqQcaP8N-PA&feature=related). En la solicitud del lugar se dejó asentado los lineamientos centrales del encuentro, con el sitio internacional de la UPF (http://www.upf.org/) a fin de que pueda recabarse información adicional, si se quisiese, de las características del evento, cuyo formato se viene desarrollando con singular éxito en todos los rincones del mundo. Vale ampliar que el Programa del ILC que tuvo lugar en Buenos Aires contó básicamente con dos componentes: A. Conferencias, en las que se transmitió la visión, principios e iniciativas de paz de la UPF a nivel local, regional y global; y B. Paneles, donde referentes sociales de distintos campos (político, académico, ONGs, espiritualidad, medios, etc.) dieron cuenta de su tarea bajo el título “Valores y acciones para el desarrollo social”, en el marco de algunos de los cinco ejes centrales que tuvo el encuentro: perfil del nuevo liderazgo, diálogo, cooperación, servicio y paz.

6. El contenido educativo previsto para las dos jornadas fue transmitido en su totalidad en el recinto, mientras la entrega de los certificados de Embajadores para la Paz, estipulada para la octava y última sesión, se cumplimentó en una sede cercana al lugar. Vale aclarar que el reconocimiento como Embajadores para la Paz se realiza hace varios años, destinado a referentes sociales en las más diversas áreas, por sus aportes a la reconciliación y la paz social en los ámbitos donde se desenvuelven. Esta distinción cobró mayor empuje luego del ataque a las torres gemelas del 2001, que evidenció con la mayor crudeza que no es posible la tranquilidad y la seguridad en ningún rincón del planeta con el viejo paradigma de las armas y las guerras, sino que cada vez es más indispensable estrategias que permitan el acercamiento y conocimiento de otras culturas y religiones para reducir tensiones entre pueblos o regiones, privilegiando el diálogo y enfatizando que la paz es una tarea mancomunada que involucra a todos los sectores, especialmente al liderazgo. Las personalidades de los más diversos ámbitos y los más elevados rangos recibieron este reconocimiento alrededor del mundo, manifestando profunda gratitud y compromiso por la causa de la paz, como el que expresaron quienes finalmente recibieron el certificado el 29 de agosto en Buenos Aires, en un acto que finalizó con un show musical que se extendió hasta más allá de las 22 horas, cuando originalmente debía finalizar a las 19.00.

7. “La esperanza de todas las eras es un mundo unificado de paz” es uno de los lemas de la UPF, que se reafirma hoy en los Festivales para la Paz Global (
http://www.youtube.com/watch?v=cXv-2DkPZnM) que se celebran alrededor del mundo con actos multitudinarios (http://www.globalpeacefestival.org/), donde a través de distintas representaciones musicales y culturales se busca exteriorizar que la humanidad es parte de una sola y gran familia bajo un único Dios y principios universales. Como lo expresó uno de los flamantes Embajadores para la Paz, representante y educador de un instituto terciario de Córdoba: “La paz no sólo es posible, sino que es nuestro destino irrefrenable”. Claro, la tarea no será sencilla, como una vez más quedó evidenciado, ante distorsiones periodísticas que generaron indignación y contratiempos a los participantes, aún en el actual estadio de evolución de la historia, que pareció retrotraer nuestra realidad a las épocas más oscuras del medioevo. ¡Nuestro agradecimiento a todos los que de una y otra manera colaboraron para el éxito de este Seminario y nuestras sentidas y públicas disculpas por los inesperados agravios y mal momento a los que fueron sometidos los invitados y quienes colaboran con profundo compromiso por la causa de la paz, en la que todos estamos llamados a ser protagonistas!

Lic. Miguel Werner
Secretario General de la UPF Argentina
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